La vacunación es la mejor estrategia y la de mayor impacto en su efectividad y bajo costos, demostrada universalmente para disminuir la aparición o muerte por enfermedades inmunoprevenibles. Las vacunas son una protección parcial o completa contra un agente infeccioso...
La situación general de salud es una preocupación, no solo del personal de la salud, sino también de los entes gubernamentales a nivel mundial. Mientras que las familias y las personas disfrutan de la posibilidad de una mejor calidad de vida, las vacunas permiten continuar construyendo barreras que disminuyen los riesgos de contraer o contagiar enfermedades. La viruela es un ejemplo de una enfermedad que, gracias a las inmunizaciones o vacunaciones, pudo ser erradicada mundialmente. |
| Las vacunas son una oportunidad que nos brinda la ciencia médica para evitar o aminorar las infecciones por determinados agentes ya identificados. Es por eso que debemos cumplir y aprovechar la oportunidad de aplicar los esquemas completos de vacunación. Así mismo, es una responsabilidad social utilizarlas, pues se incrementa la posibilidad de erradicar enfermedades con consecuencias diversas en la vida de las personas. Se trata de la salud de cada uno, pero también de su familia, y, fundamentalmente, del bienestar de toda la sociedad. |
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Existen vacunas para enfermedades tan variadas como la poliomielitis, la difteria, la hepatitis A y B, el sarampión, la varicela, el cáncer de cuello uterino, la influenza, el tétano, entre otras muchas que se transmiten a través de agentes infecciosos. El Gobierno, en su afán de mejorar el estado general de salud, ha dispuesto un programa denominado PAI -Programa Ampliado de Inmunización- que determina las vacunas básicas de grupos poblacionales priorizados y que se aplican en los primeros años de vida para garantizar la salud desde la niñez, en mujeres en edad fértil y en adultos mayores.
Además de ese esquema básico ofrecido por el Ministerio de Protección Social, es importante aplicarse otras vacunas que ya la ciencia ha desarrollado y que protegen de enfermedades infecciosas fácilmente prevenibles y sin riesgo de sufrir ninguna consecuencia (en algunos casos de extrema gravedad). En ciertos casos particulares, es importante revisar el nivel de riesgo al que está sometida la persona, como su trabajo, enfermedades que tenga de base, la edad, el lugar de residencia o viaje, entre otros.
Algunas vacunas requieren la aplicación de varias dosis, con unos tiempos estipulados entre una y otra. Es fundamental completar estos esquemas; de lo contrario, no estará dándose la inmunidad necesaria y se estará perdiendo el efecto protector, así como dinero y esfuerzo. |
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Es muy importante destacar que este no es un “asunto de niños”, sino que en todos los momentos de la vida hay una serie de vacunas que debes considerar, para ayudar a la propia salud, y también para evitar la proliferación de enfermedades en tu comunidad.
A continuación te presentamos un listado básico de las vacunas que debes tener en cuenta para cada momento de la vida. Es fundamental tener, guardar y cuidar muy bien el carné de vacunación, documento en el cual se escribe el nombre de cada una de las vacunas que has recibido, con fechas, tanto de aplicación como de segundas dosis o refuerzo, cuándo fue aplicada y las fechas en las que debe aplicarse nuevamente. |
| .jpg) | Recién nacido: Hepatitis B y BCG (vacuna para prevenir la tuberculosis).
2 meses: Rotarix o Rotateq (una de las dos), Polio, Neumococo (Prevenar o Synflorix) y Penta (que incluye Hib, DPT y HB) o Hexavalente (que incluye Hib, VIP, DPT y HB).
4 meses: segunda dosis de Rotarix o Rotateq, polio oral, Penta o Hexavalente (dependiendo de cuál se aplicó) y Neumococo (Prevenar o Synflorix) .
6 meses: tercera dosis de Rotateq, polio oral, Penta o Hexavalente (dependiendo de cuál se aplicó) y Neumococo (Prevenar o Synflorix) . Primera dosis de Influenza.
7 meses: segunda dosis de influenza.
12 meses: SRP (Sarampión, Rubéola y Papera), Fiebre Amarilla (primera dosis; el refuerzo es a los 20 años), Hepatitis A y Varicela.
15 meses: refuerzo de Neumococo (Prevenar o Synflorix).
18 meses: primer refuerzo de DPT (Difteria, Tosferina , Tétano), Polio Oral y Pentaxim (o Tetraxim, dependiendo de cuál se aplicó). Segunda dosis de Hepatitis A.
Entre 3 y 98 años: Pneumo 23 solo para población de riesgo (en cualquier momento en ese rango de edad).
5 años: segundos refuerzos de DPT (Difteria, tosferina y tétano) y Polio o Tetraxim (dependiendo de cuál se aplicó). Primer refuerzo de SRP (Sarampión, Rubéola y Papera) .
Entre 5 y 14 años: Anti-Meningococo BC según indicación medica (y el refuerzo se aplica pasados cinco años).
Mujeres entre los 10 y los 49 años: TD (Tétano y Difteria) (segunda dosis al mes, tercera a los 6 meses de la primera, cuarta al año de la tercera, quinta al año de la cuarta).
Boostrix o Adacel.
Mujeres entre los 9 y 45 años: Gardasil o Cervarix –contra el Virus del Papiloma- . Se recomienda ponerlo antes de que se inicie la vida sexual. Segunda dosis a los 2 meses, tercera a los 6.
Para viajeros: Triple Viral, Fiebre Amarilla e Influenza (esta es cada año).
Padres, cuidadores de bebés y trabajadores de la salud: Adacel (Contra la tosferina en adolescentes y adultos).
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